Gran Premio de Austria 2015
El Gran Premio de Austria consigue ser al mismo tiempo una experiencia nueva para la Fórmula 1 y una de las carreras más históricas de este deporte. Celebrada en un principio en el aeródromo de Zeltweg a mediados de los 60, la carrera encontró su hogar permanente en un nuevo circuito situado en la localidad próxima de Spielberg en 1970. El Österreichring original era una explosión fluida y temerosa de alta velocidad, con el bello telón de fondo del paisaje de los Alpes de Estiria. Allí se celebró la carrera hasta 1987, año en el que la preocupación por la seguridad del circuito obligó a su retirada del calendario durante una década, antes de que regresara en 1997 con un trazado bastante más reducido. La carrera vuelta a nacer duró siete temporadas, hasta que desapareció una vez más durante otra década y, finalmente, volvió a incorporarse a la competición el año pasado.
Entre los grandes premios de 2003 y 2014, el trazado del circuito ha cambiado muy poco. Las cuatro rectas garantizan que el acelerador vaya pisado a fondo durante gran parte de la vuelta, pero el número inusualmente pequeño de curvas hace que la recuperación mediante el MGU-K sea una tarea delicada. Al igual que Interlagos, la pista de Spielberg, a sus aproximadamente 700 metros, está situada a una altitud elevada, lo que en la era moderna se traduce en la necesidad del turbo para rodar a mayores rpm y poder compensar la baja presión atmosférica. No obstante, en 2015 el circuito quedará eclipsado por el regreso de otra sede legendaria de la F1: el Autódromo Hermanos Rodríguez de Ciudad de México, situado a una elevación de 2.285 m.
McLaren es la escudería que más éxitos ha cosechado en la historia del Gran Premio de Austria. Ha ganado el encuentro en seis ocasiones y quizás la victoria más destacada sea la de Niki Lauda en 1984, su único triunfo en casa.
